Venezuela en 2025: expectativas y desafíos económicos

En 2025, la economía venezolana enfrentará un panorama de crecimiento moderado, estimándose un aumento del Producto Interno Bruto (PIB) de aproximadamente un 2,5%, según proyecciones de firmas económicas como Ecoanalítica. Sin embargo, la desaceleración se comparará con las expectativas más optimistas del gobierno, que apuntan a un crecimiento cercano al 10% para el próximo año. A pesar de este leve crecimiento, los analistas advierten que diversos factores, tanto internos como externos, podrían limitar la estabilidad económica del país.

Uno de los principales retos para la economía venezolana será la incertidumbre política, marcada por la reelección de Nicolás Maduro, cuyo proceso ha sido objeto de controversia, y por las posibles tensiones generadas por la administración estadounidense bajo Donald Trump. Las licencias petroleras, esenciales para la recuperación del sector, están en juego; de mantener las sanciones de EE.UU. UU. sobre el crudo venezolano, se prevé que la producción de petróleo podría alcanzar los 1 millón de barriles por día, pero cualquier alteración en estas licencias podría llevar a una recesión económica.

El país sigue dependiendo enormemente del petróleo, que, aunque ha experimentado un leve aumento en su producción, sigue siendo fundamental para mantener estable la moneda y los precios internos. Las políticas antiinflacionarias actuales, basadas en la inyección de dólares provenientes de los ingresos petroleros, podrían verse comprometidas si las tensiones internacionales persisten o si las condiciones políticas internas no mejoran. Esto podría derivar en un aumento del costo de vida y en una mayor inflación, que según las previsiones, podría llegar al 70% en 2025.

En este contexto, los expertos sugieren que Venezuela necesita implementar reformas significativas en su política económica, con el fin de atraer inversión extranjera y lograr una mayor diversificación de su economía. Sin embargo, la clave para una recuperación sostenible dependerá de factores externos como la relación con Estados Unidos y la estabilidad interna del país. Si estas circunstancias se mantienen estables, Venezuela podría ver una recuperación moderada en el próximo año, aunque con riesgos de serios obstáculos a corto plazo.

RealRisk / Fuente: El Nacional

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *