Según un estudio de Ipsos y Fundación Veg, el 46% de los chilenos intenta disminuir su consumo de alimentos de origen animal, principalmente por motivos de salud, economía y bienestar animal. Sin embargo, esta tendencia enfrenta desafíos legales en el país, con iniciativas que buscan restringir el uso de términos cárnicos para productos de origen vegetal.
Un reciente estudio de Ipsos y Fundación Veg, titulado Estudio de Opinión Pública: Alimentación y Productos de Origen Animal , revela que un 46% de los chilenos intenta reducir su consumo de alimentos de origen animal. De estos, un 31% lo hace por razones de salud, mientras que un 14% menciona el costo de estos productos, y un 13% se enfoca en el bienestar animal como su principal motivación. Esta tendencia nacional se enmarca en un contexto global en el que el mercado de alimentos de origen vegetal muestra un crecimiento sostenido: un informe de Meticulous Research proyecta que este mercado alcanzará los US$113.000 millones en 2031.
A nivel mundial, la reducción en el consumo de alimentos de origen animal responde a diversas razones, como la salud y la sostenibilidad ambiental. Según la directora de Fundación Veg, Ignacia Uribe, una dieta basada en plantas puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas hasta en un 32% y disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 70%, resaltando la relevancia de esta tendencia en la lucha. contra el cambio climático.
Sin embargo, en Chile, estas preferencias se encuentran con ciertas restricciones a nivel legislativo. En marzo de este año, se aprobó una ley que prohíbe a los productos de origen vegetal utilizar términos asociados a la carne. Además, este 10 de septiembre, el Congreso discutirá un proyecto de ley que busca imponer nuevas limitaciones a la industria de alimentos basados en vegetales, afectando potencialmente el desarrollo de la industria Foodtech en el país.
RealRisk / Fuente: EnAlimentos