Según el estudio “Anatomía del consumidor colombiano 2025” publicado basado en datos de NielsenIQ, Gartner y McKinsey, el consumidor colombiano se caracteriza por una creciente exigencia en sostenibilidad, hiperpersonalización y confianza en marcas con propósito. Estas tendencias están redefiniendo las estrategias comerciales en un entorno omnicanal y digitalizado.
El consumidor colombiano de 2025 se mueve en un entorno omniphygital, donde la experiencia de compra combina lo físico y lo digital sin fricciones. De acuerdo con Salesforce, el 80% de los compradores espera una experiencia omnicanal fluida en todos los puntos de contacto.
Uno de los hallazgos más relevantes es que el 45% de los consumidores prioriza la sostenibilidad al tomar decisiones de compra, especialmente entre las generaciones más jóvenes. Esto incluye preferencia por empaques biodegradables, procesos responsables y marcas comprometidas con causas sociales.
La hiperpersonalización también se consolida como una expectativa no negociable. Según Gartner, el 95% de las interacciones con consumidores estarán influenciadas por inteligencia artificial, lo que exige a las marcas demostrar un conocimiento genuino de sus clientes.
Además, el consumidor colombiano valora cada vez más las interacciones auténticas con las marcas. Las redes sociales se han convertido en espacios clave para amplificar experiencias, con el 70% de los compradores influenciados por recomendaciones en estas plataformas.
La Generación Z, que representará el 30% del gasto global según McKinsey, muestra una fuerte inclinación por marcas digitales y regenerativas, lo que obliga a las empresas a construir confianza de forma incremental y sostenida.
Este perfil de consumidor exige a las marcas colombianas repensar sus estrategias, diversificar sus nichos y fortalecer su propuesta de valor con atributos como conveniencia, impacto social y autenticidad.
RealRisk / Fuente: NielsenIQ, Gartner y McKinsey