En el contexto actual del mercado global, los consumidores están redefiniendo qué entienden por “lujo”, desplazando el valor del simple atributo material hacia experiencias significativas y sensoriales que aporten valor emocional y personal. En este nuevo paradigma, el lujo deja de ser sinónimo de precio elevado o exclusividad tradicional para convertirse en una experiencia memorable que genera satisfacción, conexión y diferenciación frente a ofertas masivas.
La experiencia sobre el producto
Según expertos en mercadeo y comportamiento del consumidor citados en el análisis, el lujo actual se centra en la percepción y la vivencia: cómo se siente la interacción con una marca, la historia detrás de un producto, el nivel de personalización en el servicio y la coherencia entre la promesa y la experiencia real del cliente. Estos elementos se han convertido en factores determinantes para que una marca sea percibida como valiosa o aspiracional.
Este enfoque ya se observa en sectores como la hotelería, gastronomía, moda y bienes de consumo, donde las marcas que integran servicios personalizados, atención al detalle y experiencias multisensoriales logran un mayor nivel de fidelidad, incluso entre consumidores más jóvenes que tienden a priorizar vivencias sobre posesiones.
De la exclusividad al significado personal
El artículo destaca que, para muchos consumidores hoy, el verdadero lujo está ligado a la conexión emocional y al significado personal. Esto puede manifestarse en la preferencia por productos que cuentan historias auténticas, en la búsqueda de experiencias únicas o en la valoración de marcas que promueven sostenibilidad, propósito y coherencia con los valores individuales.
Esta tendencia influye directamente en la manera en que las empresas diseñan sus estrategias de marca, marketing y producto: ya no basta con comunicar atributos técnicos o características objetivas, sino que es necesario crear contextos que generen emociones, recuerdos y vínculos personales.
Un nuevo enfoque competitivo
En suma, el lujo contemporáneo se redefine como una combinación de calidad, experiencia y narrativa de marca. Las firmas que logran integrar estos elementos de forma coherente y memorable se posicionan mejor frente a consumidores exigentes que buscan más que un bien; buscan un significado, una historia y un valor añadido que trascienda la funcionalidad.
A continuación, se puede encontrar el estudio completo:
RealRisk/ Fuente: EY Luxury Client Index 2025